"... Porque a pesar de todo nos hicimos amigos
y me mantengo firme gracias a ti, poesía,
pequeño pueblo en armas contra la soledad".

(Javier Egea)

domingo, 11 de septiembre de 2011

Desde el tren...

Este tren me devuelve mi sitio, 
y me hace sonreír.
Recuerdos que nunca fabriqué
y sin embargo, 

formaban parte de mí
absorben ahora toda la energía de estas vías
y escribo estas líneas alejándome de Córdoba,
ciudad bañada en agua estos días
y en talento siempre....

Este tren me llena el aire de canciones
y la cabeza de versos, para cantarlos después 
y soltarlos en tu esencia.

Estas vías atraviesan el río que emerge paciente, 
tranquilizando las cosas que van a toda velocidad
sin remedio alguno, seguramente, 
porque han de ir así...

Anoche vi cómo las calles me sonreían 
aunque era la primera vez que me veían
pero yo sé que me conocen de siempre
y me abren sus manos para que las vea
y me acunan entre sus mantas de noche.

Y ahora, todo vuelve a la normalidad
y a la sin razón del día a día.
Ahora todo sigue rodando de la misma manera
monótona y sin mirar atrás,
y yo... , solo pierdo el tiempo en soñar
en aumentar los pájaros de mi cabeza,
después de tres días pateándome tus calles
alejándome en este tren, echo de menos tu ciudad.

Y tengo que confesarte,
que aunque no apareciste
te vi en el río y en el puente,
te vi en La Espiga y en las flores,
te vi en las cervezas del medio día
y en el té de la tarde,
te vi en los patios florecientes
te vi en la guitarra de aquél cuadro
te vi en el vaivén de los árboles, 
te vi en los autobuses que se iban
que siempre se estaban yendo...,
te vi entre las guitarras eléctricas
que hacían saltar a la muchedumbre
te vi entre aquellos muchachos con barba 
y pelo largo que intentaban tocarme el pelo
sin que yo me diera cuenta.

Te vi en la estación, 
en el leve palpitar de los trenes,
melancólica, como todas las estaciones
borracha de despedidas y repletas de musas.

Te vi desde aquella habitación
mirando por la ventana, 
intentando descifrar donde estaría tu casa.

El ultimo amanecer fue hermoso
La Fuensanta se tornó azul..., 
un azul intenso como de cielo,
dispuesto a amanecer soleado
después de dos días mojándonos.

Conocí tu paisaje y no te vi, no apareciste.
Eché de menos encontrarte...


Amanecer

6 comentarios:

  1. Si, lo sé, me repito más que un disco rayao..... pero me encanta jajajaja

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  2. buenas ya os sigo mi blog es http://www.javisfc.com/ saludos

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  3. Muchas veces las palabras te pueden a transmitir sensaciones y emociones.. Es una invitación a la introspectiva de mi melancolía, Gracias por tu entrada éxitos y buenas vibras..

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  4. Gracias a ti por tus palabras, y felicidades x tu bonito blog! :):)

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